¿Alguien ha logrado hacerle entender al corazón lo que la mente ya tiene bien procesadito?, ahí les encargo el tip, que yo no estoy encontrando ese equilibrio.
Aconsejo a mis amigas, les digo estupideces como "yo no creo que sea imposible ser amiga de tu ex, tu tranquila", doy abrazos y aseguro que hay personas por las que vale arriesgar todo. Y sí lo creo, él valió que yo diera ese brinco de fé al: qué después pase lo que tenga que pasar, ahorita estamos juntos y eso es lo que importa. El problema es que aún creyendo todo esto, no puedo dejar de bajonearme cada vez que se va, no puedo quitarme los te extraño's de la lengua, y no - ni poquito- me imagino qué le voy a decir, qué me va a decir, qué vamos a hacer en diez días.
Borré el comienzo de esta entrada 4 veces. Yo sé que vendré a escribir sobre la despedida, porque lo voy a necesitar. Llevo evadiendo mis ideas por meses, sólo por el miedo de tener que ponerle palabras a esto (lo malo, es que no es tan fácil dejarlas de pensar).
Bla bla bla "good things come to those who wait", bla bla bla "yo no sé mañana", bla bla bla "all we need is just a little patience".
Nope, mi corazón no entiende de lógica; el muy tonto namás quiere estar con su negro y pues, se me hace que hay un niña berrinchuda adentro de mí que se niega a escuchar toda razón y sensatez.
"If I can't have you right now, I'll wait dear" - estúpidos guns n' roses cools :(
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t u . d i m e .